Las comunidades Lule-Vilela del paraje El Retiro, en la localidad santiagueña de San José del Boquerón, difunden desde FM Paj Sachama los testimonios de las familias campesinas e indígenas del norte de la provincia argentina. En sus instalaciones también funciona una fábrica de dulces y una embotelladora de miel.
-¿Cuántas fueron las bombas de combustible colocadas en la radio?
-Eran 3, explotaron 2, una no terminó de explotar bien, que estaba encima de las 24 baterías. La botella esa la saqué yo con la mano, y la tercera estaba puesta para el camión y yo no le di tiempo a esa, así que no llegó a explotar y ahí se me fue el tipo de aquí.
-¿Han sufrido este tipo de situaciones en alguna otra oportunidad?
-A nosotros nos sorprende, porque es la primera vez, creo que aquí en la provincia de Santiago también. Esto para nosotros es un atentado, y lo tenemos con nombre y apellido al que nos ha querido dañar, también a quien está pagando todo esto, sabemos quién es, tenemos muy en claro quienes son estas personas.
-¿A qué atribuyen lo sucedido?
-Me parece que la comunicación que tenemos nosotros aquí para las comunidades les molesta muchísimo, aparte nosotros como MoCaSE Vía Campesina venimos trabajando desde hace muchos años sobre la defensa de nuestro territorio, por la soberanía alimentaria de nuestra tierra. Difundimos revistas, informaciones y todo lo que trabajamos dentro de las tierras, y vamos aconsejando a nuestros compañeros de la zona de que tenemos que defender todo nuestro territorio; eso les molesta muchísimo, y quieren hacer desaparecer una comunicación que les pega mucho políticamente, a los empresarios y a algunas personas más que no les gusta.
-Las radios comunitarias del MoCaSE funcionan como una herramienta fuerte para hacer escuchar las voces de las familias campesinas.
-Sí, muy fuerte. Esto nos favorece muchísimo, porque aparte en la organización que tenemos, muchas veces no podíamos llegar a las distancias de las comunidades. Todo aquí es bosque, nos cuesta mucho llegar, a veces con bicicleta, con moto, y a través de esta radio, el MoCaSE puede trabajar amplia y favorablemente hacia las comunidades.
-¿Qué daños sufrieron en el estudio?
-Los daños no causaron pérdidas graves, sino que se perdieron algunas lámparas, se perdió algo de papeles de la biblioteca. No le di tiempo a que agarre toda la llama de adentro, porque le vertí agua muy rápido, muy rápido, entonces lo pude apagar y los daños fueron muy pequeños. Agradecemos todavía a Dios porque no nos explotó un motor con nafta que tenemos dentro de la FM, que es el generador cuando no tenemos nuestro sol, nuestras pantallas no funcionan. Ese motor, si explotaba adentro, no nos quedaba nada de nada.
-¿La radio funciona normalmente con paneles solares?
-Tiene 18 pantallas solares, tiene 24 baterías que trabajan a 12 voltios y pasa por un generador a 220. Nosotros funcionamos con el sol. Cuando tenés varios días nublados, funcionamos con batería, y este tipo de generador nos mantiene al aire.
-¿Cuantas comunidades aprovechan el espacio de FM Paj Sachama?
-Son muchísimas. Más o menos estamos llegando a algunos lados a 80 km y a otros lados a 60 km. En ese radio de distancia tenemos muchísimas, pero muchísimas comunidades que nos están escuchando, que nos están sintonizando todos los días, así que no te podría decir cuantas son las familias que están ahí dentro.
-¿Presentaron alguna denuncia luego del atentado?
-Yo fui a la policía. Ese día fue para nosotros todo malo, porque encontramos solamente a la policía femenina, de los 4 del personal que hay en el destacamento de Boquerón. Casi nunca están. Pudo venir esta policía femenina a investigar el caso y recién al otro día, a las 5 de la tarde, ayer (viernes), nos tomaron la denuncia en la comisaría, así que se nos perdieron más de 24 hs para que nos tomaran una denuncia.
-¿Hay algo que te gustaría agregar?
-Nosotros vamos a seguir la investigación dentro del MoCaSE a través de los medios internacionales que también nos están llamando para poder ir denunciando todo lo que ha sucedido. Que sepan todos cómo estamos hoy en este mundo cambiado, atravesado por una política sometida abajo de gobiernos corruptos y una justicia que no existe. Estamos monte adentro, las calles son solamente de tierra, así que estamos muy contentos de estar acompañados a través de muchísimas personas y muchos compañeros.
* Por Raquel Schrott y Ezequiel Miodownik para la Agencia de Noticias Biodiversidadla.